Final feliz con sabor agrio

inal feliz con sabor agrio

Cuando me inicie en esto de confesar mis más profundos secretos nunca pensé en que se convertirían en una adicción tan grande como el mismo sexo al menos al principio, comencé sugerido por mi sicólogo como parte de una terapia que el mismo programo a modo de “salvarme” de mi misma, siendo esta una manera de ayudarme, desahogarme y tranquilizarme. A pesar de que me repetían una vez tras otra que era por mi bien, yo suelo escribirlas todas para que queden constancia en una serie de diarios que obviamente más parecen la biblia… ji ji ji, aunque por otro lado es escribirlas me hace recordarlas y no puedo evitar excitarme, claro está esto lleva consigo el no poder contenerme al dirigir mi mano a mi entre pierna y comenzar a masturbarme… mmm.

Mirad antes de nada os debo confesar que no me encuentro en mi ciudad… ya que por motivo de trabajo me veo “obligada” a trabajar fuera hasta de mi propio país, me encontraba en una extraña ciudad… una ciudad de Portugal muy cerquita de Badajoz, nuevamente desplazada por no tener cargas familiares y peleada con el "NO" (coño, no hay pregunta, sugerencia o propuesta que mi respuesta no sea siempre si o vale).

Tras un fatigado día de trabajo fui invitada por algunos compañeros a tomar algo... aceptando finalmente, estos antes de retirarme me propusieron ponerme algún vestido de fiesta, pues a eso precisamente íbamos. Tras al hotel… abrí mi maleta en busca de algún vestido que me pudiera poner, ante la inexistencia de este mas porque yo había venido a trabajar y no a pasármelo bien, no eche prenda alguna. Por lo que baje a comprarme algo para la ocasión y teniendo la suerte que cerca del hotel había unas tiendas, comprándome de una de ellas un vestido súper sexy y nada de caro (59€), era un vestido de fiesta con mangas de ¾ con una serie de detalles dorados y corto… muy corto, sabéis una cosa lo que más me atrajo fue su escote. Bueno allí mismo me compre para cerrar las comprar un cinturón (9,95€) y unos zapatos negros de aguja (29€)… obviamente todo iba a ir a cargado a gastos, el vestuario perfecto para esa noche.

Cuando me disponía a marcharme… vi algo que realmente me enamoro y no pude contenerme, fue un hermoso corsé negro con encajes y ligueros… mmm, no solo me detuve a mirarlo sino que aun menos me pude contener a comprármelo… sin importarme cuanto costara (joder, súper sexy). Perdonadme pero me voy a recrear contándolos los detalles de esta hermosa prenda… vale, mira este corsé sexy que me costó solamente 29€… negro con encajes, liguero desmontables que claro esta no iba a utilizar y un tanga de encaje a juego… mmm, prenda que no me pude poner más por no pegar con el vestido que me había comprado.

Continuo… ya en el hotel, duchada y arreglada con mi vestido nuevo, medias de ligas, ropa interior y zapatos… me dispuse a esperar pero no por mucho tiempo, pues como bien me hicieron saber previamente me  avisarían para venir a recogerme, se quedaron de piedra a ver mi vestuario  y durante gran parte de la noche no hubo chico que me tirara los tejo… claro está para llevarme al huerto. Primero me llevaron a cenar para continuar llevándome a varios locales de copas donde en el último… hicieron amistad con algunas chicas, tras pedirme permiso para ir a la pista a bailar y os digo que el pedirme permiso… era porque me iban a dejar sola. En no más de cinco minutos fui abordada por un caballero con traje oscuro y corbata... mi primera expresión.

    "Ostias... Bárcenas", me dije para mis adentros.

Pero obviamente no era... físicamente se le parecía, pero este tenía menos cabellos y los que tenia eran de color blanco, tenia perilla y gafas con estilo intelectual y de aspecto banquero, abogado o empresario. De cuerpo atlético como que no… su barriguita daba sensación que era un hombre de buen comer o sea que no era de beber, pero aun así tenía un cuerpo voluminoso y físicamente de extremidades grandes. Tras saludarme... me pregunto si estaba sola o si esperaba a alguien, claro está le conteste que supuestamente no… que estaba en compañía de unos amigos y compañeros de trabajo que en esos instantes estaban bailando en la pista.

    "Tú no eres de aquí... verdad, sino te reconocería pronto", me dijo.

Tras una pequeña conversación a modo de explicarle mis motivos por el cual era nueva en la ciudad… este me interrumpió y entre disculpas se me presento, pues según decía que era un descortés al no haberse presentado primero. Me hizo saber que se llama Luis y que es gerente de una famosa empresa de construcción. Los besos que me dio por presentarse fueron más cerca de mis labios que de mis mejillas.

Era muy agradable y bromista… no dejaba de hacerme reír, pronto su labia y su confianza se vio venir y claro está sus intenciones (coño, cosa que no me molesto), mis amigos aparecieron al cuarto de hora largo y tras verme acompañada entre risas maliciosas me hicieron saber se marchaban y que nos veríamos en la oficina, quedándome en compañía de este hombre. Luis poso su mano sobre el respaldar del taburete… comenzando a deslumbrar esa confianza que se venía venir, pues con su pulgar comenzaba a deslizarlo por mi desnuda espalda… mmm, claro está lo deje este galán caballero sabia como tratar a una joven dama y la verdad es que lo estaba consiguiendo.

Ante mi aceptación ascendió su mano por mi espalda haciéndome estremecerme con su tacto… mmm, sentí como un escalofrió que acabo en mi cuello… ooohhh. Os debo confesar que me encontraba perfectamente bien… pues entre copa y copa y la agradable conversación que este inicio en torno a la historia de la ciudad, me tenía dispuesta… uuummm. Dejo caer su mano izquierda sobre mi muslo y comenzó a deslizarla desde medio muslo hasta mis rodillas… una vez tras otra, como no la apartaba y menos le decía algo… quiso ascender más, pero le tuve que detener en varias ocasiones más por no parecer una chica fácil.

Pero fueron sus besos en mi cuello (joder, mi mayor perdición) quienes me convencieron y tras soltar un leve quejido… introdujo su mano entre mis piernas, acariciándome por el interior de mis muslos hasta sentir las yemas de sus dedos rozar mi pubis… ooohhh. No sé como… pero pose mi mano sobre su bulto e inocentemente comencé a deslizarla, notando una tremenda erección… mmm. Me pregunto si tenía sitio donde pudiéramos ir y aunque inicialmente le hice saber que no era de allí, le tuve que recordar nuevamente que no soy de la ciudad e ignoraba lugares donde pudiéramos desfogarnos, le hice saber que podríamos ir a mí hotel pero claro esta… este no deseaba que fuera visto conmigo, por lo que me sugirió un hotel donde suelen ir las parejas.

En el viaje de trayecto apenas hablamos y por supuesto yo no deje que la cosa se enfriara… por lo que no deje de magrear su bulto… mmm. Nada más subir a la habitación y cerrar la puerta tras de sí, nos abalanzamos como simples quinceañeros… mmm, Luis no dejaba de acariciar mi cuerpo… no os sabría decir que parte de mi cuerpo no acariciado, pronto poco a poco fue despojando de mis ropas… comenzó por mi chaqueta… dejándola caer al suelo, mientras nos besábamos al mismo tiempo que desabotonaba los botones de mi blusa… dejándola abierta y mostrándole mi sujetador negro con encajes. Yo en cambio acariciaba su espalda y pechos… dándole pequeños bocaditos… mmm, mientras su mano izquierda acariciaba mis nalgas sobre mi falda con su derecha me tomaba por mi cuello al tiempo que sus labios besaba y mordisqueaba mi cuello y lóbulos… ooohhh.

    “Soy casado… no es que te vaya a pedir una relación”, me soltó.

Le hice saber que me lo imagine y no solo por su anillo… sino por un presentimiento, pronto su mano izquierda la cual se había deslizado por mi muslo en forma ascendente se introdujo por debajo de mi falda hasta nuevamente mis nalgas y descubrir mi tanga, sonoramente con un murmullo de degustación note que le gustaba al mismo tiempo que el palpitar de su miembro… mmm. Tras quitarme la camisa y lanzarla… continuo con la falda… dejándome en ropa interior y mis medias negras de ligas, yo hice lo propio con Luis… despojándole de la corbata, camisa y cinturón, mi mano se encontraba ya dentro de su bragueta magreando su gran bulto… mmm.

    “Desearía hacerte tantas cosas… pero me da cosa que te miedo probar”, me dijo.

    “Hazme lo que tú quieras… esta noche soy tuya, no soy tu esposa… sino tu zorra”, le conteste… quizás llevada por la excitación.

Con sus manos cogió mis senos y se inclino hasta que su boca comenzó a besar mis senos… ooohhh, sentí su pulgar juguetear con mis pezones… sin molestarle el sujetador pues yo misma me lo solté… ooohhh (joder, os debo confesar que la velada prometía mucho… era divina). Se detuvo y sin dejar de mirarme se dirigió hacia un mueble bar… lo abrió y tras coger un par de copas y una botellita de alcohol lo vertió, me hizo saber que tal velada debíamos de brindar y lo hicimos, tenía toda la pinta que iba a ser una noche de desenfreno y que posiblemente me iba a hacer disfrutar como ninguno. Una de mis manos se encontraba magreando su polla aun dentro de su pantalón... mmm, ignorando si su estado era natural, por mi presencia o la causa fue algún medicamento (viagra).

Saco de uno de los bolsillos de su pantalón un bote, unas cañitas dejándola sobre la mesa junto a la tarjeta de la habitación, me hizo saber que era cocaína y me invito a probarla… lógicamente me negué pues la única droga que tomo es el sexo. Tras mi respuesta lo dejo sobre la mesa y comenzó a besarme otra vez… ooohhh, sin dejarle de mirar sus ojos… me entre tuve en desabotonar el botón de su pantalón y al tiempo que me fui agachando tiraba de su pantalón hacia abajo con su bóxer, saltando como un resorte su verga erecta… uuummm. Tras tomarla con la mano comencé a pajeársela sin dejarle de mirarle a los ojos… ooohhh, Luis emitía sonidos de satisfacción mientras yo le masajeaba sus testículos con la mano izquierda al tiempo que se la chupaba… mmm.

Os debo confesar que solo me introducía su grande en la boca y un par de dedos mas y no por que no pudiera tragarme más, sino porque deseaba disfrutar de su polla… aaahhh. No dejaba de murmullar y entre estas soltó la petición a modo de ruego de penetrada vaginalmente y analmente, haciéndole saber que haríamos todo lo que tuviera en mente y el pudiera aguantar.

No dejaba de decirme… amo a las Sevillanas… sois lo que todo hombre desea en su cama, una hermosa y sensual jovencita, culta, inteligente, simpática, agradable, cariñosa y risueña, me gustaba como me acariciaba… quizás al ser “perro viejo” no son como los jóvenes que les pierden las prisas… ooohhh. Sus besos… tan tiernos y sobre todo mostraba una complicidad en todo momento, me hacia estremecer incluso cuando rozaba su piel con la mía… uuummm.

    “Si te pido que me la comas sin preservativo hasta el final… hasta que me corras en tu boca, aceptarías…”, me propuso no muy convincente a que lo hiciera.

Claro está le hice saber que si… cuando él quisiera se lo haría, notando en ese preciso momento como las venas de su polla endurecerse y tras atraparme con una de sus manos mi nuca… comenzó a descargar dentro de mi garganta. Trague hasta la última gota que salía de su ya no tan erecta polla y cuando mas creí que esa “hermosa velada iba a su fin”, este tomo el bote y lo abrió… tomo su polla con la mano y vertió un poco del contenido de ese bote sobre su grande, coño… sorprendida observe como echaba cocaína sobre la punta de su grande y tras hacerme echar sobre la cama. Tras ponerse un preservativo se tumbo sobre mí y su enorme y erecto miembro… comenzó a penetrarme sin ayuda alguna… aaahhh, comenzando a embestirme duramente… ooohhh… uuufff… ooohhh, no puse impedimento por su manera de cogerme pero lo que disfrutaba con esa manera de follarme tan brutal… aaahhh, más parecía que su miembro tenía mas diámetro que antes... pedazo de miembro (joder, menudas embestidas... ooohhh).

Me pido penetrármela desde atrás… pensé analmente ya, cuando le di la espalda y esperaba ansiosamente su polla en mi culito… me lleve un fiasco más porque me esperaba otra cosa, pero cuando su grande comenzó a penetrarme mi orificio vaginal… ooohhh… se me olvido todo… aaahhh, me entraba nuevamente a la perfección… sin ayuda de alguna de sus manos. Mientras yo… mientras con una mano me apoyaba para no perder el equilibrio y caer hacia delante con la otra separaba mi glúteo, comenzando yo a jadear de forma sonora… aaahhh… aaahhh… aaahhh (coño, sabiendo bien como os gusta que seamos escandalosas… mmm).

    “Me encantan ver tus pechos botar al compas de mis embestidas”, me dijo mientras me embestía con brutalidad.

Comenzó a escupir sobre mis nalgas y aprovechar para juguetear con uno de sus dedos con mi orificio anal… ooohhh, disfrutaba como la perra que soy y mientras era embestida y al mismo tiempo estaba dilatando mi orificio anal, había comenzado a insultarme mientras gemía.

    “Joder niña… como te mueves, eres toda una profesional… vales lo que tengas que vales, que cuerpo… que cuervas… que culo, no dejes de moverte… puta”, me soltaba de vez en cuando.

    “Aaahhh… aaahhh… uuuhhh…uuuhhh… aaahhh… aaahhh”, gemía yo.

Saco su miembro de mi orificio vaginal y restregándomelo por mi ingle hasta mi orificio anal, comenzó a presionar hasta que poco a poco comenzó a introducírmelo… uuummm, sentí ese trozo de carne partirme en dos mientras que lo único que pude hacer fue separarme mis nalgas a modo de que pudiera entrar mejor… ooohhh.

    “Aaahhh… aaahhh… Dios… aaahhh, no pares cabron… no pares, ooohhh… ooohhh”, volvía a gemir.

Llevaba yo al menos ya tres orgasmo obtenidos… aaahhh, cuando me hizo cambiar nuevamente de posición y tras sentarse el sobre la cama y pegar su espalda al respaldar, me indico que me sentar sobre ese pilón de carne dura… ooohhh, eso hice y grite de placer mientras botaba al compas que el mismo me impartía… aaahhh

Obtuvo un nuevo orgasmo que con prisa se quito el preservativo para echar su abundante, cremosa y caliente leche sobre mis senos… esparciéndola el mismo con una de sus manos… uuummm, estaba extenuada… le pedí descansar diez minutos antes de marcharnos, me metí dentro de la cama y él se metió también dentro… posando su velludo cuerpo sobre mí, mientras sentía aun su verga caliente y dura presionar mi orificio anal al tiempo que besaba mi cuello y sus manos magreaban mis senos doloridos y enrojecidos… aaahhh. Antes de caer rendida por el sueño os debo confesar que este me estaba penetrando sin importarle que si yo lo deseaba o no, su duro miembro entraba y salía sin preservativo de mis orificios… pues si me penetraba por cinco o diez minutos mi orificio vaginal, hacia lo mismo con mi orificio anal.

Tras despertar gracias a mi móvil… descubrí que estaba sola en la habitación, Luis no estaba y mi ropa estaba esparcida por esta, cuando me dispuse a coger el móvil me encontré con la sorpresa de encontrarme una nota con 200€. En la nota se podía leer:

“Mira cuanto lo siento… siento dejarte dormida con esa angelical rostro extenuado y rendido, siento dejar ese hermoso cuerpo caliente, pero me debo de ir me reclama mis obligaciones y mi familia. Ignoro cuanto cobrar pues lo que menos hemos hablado ha sido el precio, pero por lo que hemos hecho y como me has hecho sentir… vales mucho, te dejo aquí 200€… si es más tranquila que la próxima vez te los daré, besos tu Luis”

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Páginas